En la cubierta del barco Se parece a él, por supuesto,
este pequeño retrato hecho a lápiz.
Fue hecho de prisa, en la cubierta del barco,
una tarde mágica,
con el mar de Jonia rodeándonos.
Se parece a él, aun cuando le recuerdo más bello.
Era de una sensibilidad casi enfermiza
y eso iluminaba más su rostro.
Y más hermoso me parece ahora
cuando le recuerdo hace ya tantos años.
Hace ya tantos años. Todo ha envejecido-
el retrato, el barco y aquella tarde.