Beirut now Murió el torturador asesinado por el hijo del torturado muerto
inocentemente.
Murió la joven sabra de ojos melancólicos.
Murió el viejo Alí allí donde el carro bomba estalló a primera hora de la
mañana.
Murió el periodista yanqui a quien le pagaban por mentir.
Murió el pastor inglés que ofreció su otra mejilla en lugar del culo.
Murió el aviador sirio que soñaba con las "Mil y una noches".
Murió La Verdad. Murió La Esperanza.
Y mientras tanto yo en Panamá como mierda cobardemente pensando en
la suerte de lo lejos que queda Beirut...