Últimas palabras del joven rimbaudal poeta paul verlaine para N. E.; cómplice
hermano paul
querido verlaine
mi amante
ayer te he visto pasar desnudo
embarazado de dolor en todo tu parto
adivinando el iris de mis ojos tras el lienzo
dormido o despierto
insomne o sonámbulo
pero caído hasta mi piel
con el orgullo de la ciudad atemperando el cemento
ayer a ratos me sentía un pájaro
era uno de tantos con perfil de cadáver
donde quiero deshacerme prisionero
esclavo del vuelo sobre mi lumbre
ayer parís no semejaba parís
tan sólo un simulacro de la aurora
y notre dame parecía tu pupila
corriendo la lluvia hacia el sena condenándose
ayer a ratos no era homicida
ícaro sin alas mecido
por las llamas eléctricas como un muro
y lejos
tan oscuros como el mar
morían los mirlos del cansancio
fugitivos en su propio fuego
ayer casi isla me quedaba*
y hoy también desnudo y sin sexo
me atrevo a ser roca con pálpito de templo
cuando aborta la tempestad los calendarios
y no me basta la sed
ni se corrompe este verdor entre mis piernas
ayer fui pájaro y un reloj
otro cuerpo sin precio
ayer a ratos quise ser cruel
quise morir y tú no estabas
era inmortal
para ver en mi rastro la edad del almendro
adiós hermano paul
querido verlaine
mi amante
quiero morir y nada puede salvarme
el albatros ha partido
las islas son tal un pueblo de barcas
y la noche
un solitario puerto donde errabundo espero
ebrio con mi naufragio de naipes
inválido de tiempos
hermano paul
querido verlaine
mi amante
haz que la ciudad coma su polvo